Capitulo 14

Narra Paula.

A que se refería con eso?

En fin… entré en casa y dije un suave Hola mami, nadie me respondió no estaría en casa.

Se me ocurrió una idea. Tenía ganas de salir a dar una vuelta con Dalas. Pero antes deje una nota… 

Mama llegaré tarde estoy con Dalas te quiero!

Entré en la cuadra me puse la camisa de cuadros y al atarla por encima de mi ombligo me salió una leve sonrisilla picara. Me encantaba mi nuevo tatuaje.

-Hola Dalas-le acaricié el morro mientras cogía el sillín.

-Arre Dalas! Arre!-subí por la ladera hasta llegar a la playa.

Mierda había alguien era una chica. Y a esa chica la conocía yo!

-Marta!-grité bajando del lomo de Dalas.

Ella se giró, estaba llorando. Arranqué a correr hacia ella, y la abracé.

-Que…que te pasa Marta?-estaba asustándome.

-Me han llamado del hospital-dijo llorando cada vez más.

-Como del hospital? Marta ostia que ha pasado?!-me tensé.

-Mi madre ha tenido un accidente-me abrazó fuerte, con la respiración muy agitada.

-Y que más te han dicho?!-los nervios se apoderaban de mí.

-Que iba acompañada…

-Que, qué?!-me temía lo peor, mama no estaba en casa.

-No me han dicho quién era ni con quien iba, no sé nada más que lo que te he contado joder!

-No me grites vale!- estaba nerviosa.

-Si estás aquí para ponerte así vuelve por dónde has venido.

Me di media vuelta y arranque a correr, mientras no podía parar de llorar.

Subí a los lomos de Dalas en la velocidad de la luz y le ordené que fuera al galope.

Llegué a casa y metí a Dalas en su cuadra. Cerré la puerta de un portazo, saque las llaves de casa del bolsillo y abrí la puerta.

-Mama!-grite con todas mis fuerzas.

-Que pasa Paula te encuentras bien?-salió asustada de la cocina.

No contesté me abalancé sobre ella y lloré, lloré como una cría pequeña.

-Cariño que te pasa? Ha sido Justin?

Negué con la cabeza. 

-Entonces?-dijo elevándome la cara por la barbilla.

-E ido a la playa y-hice una pausa para intentar coger aire.

-Paula y que?!-esta vez la que se ponía nerviosa era mi madre.

-Estaba Marta llorando, la he preguntado y me ha dicho que su madre está en el hospital, ha tenido un accidente, al decir que iba acompañada y ver que tu aun no habías llegado a casa me he asustado.-me abrazo.

-Mi niña tranquila.

-Mama, me he puesto nerviosa y he dejado a Marta allí-empecé nuevamente a llorar.

-Vale haber tranquila, vamos a buscarla.

Abrí la puerta y vi como venía Marta andando.

-Mama está aquí!-arranqué a correr en dirección a ella y la abracé.-Perdóname estaba nerviosa-me cortó.

-Tranquila, no pasa nada.

-Te vienes?

-A donde-se secó las lágrimas

-A ver a tu madre.

-Si por favor.

-Venga.

Entramos en el garaje y nos metimos en el coche.

Después de 20 minutos llegamos al hospital.

-Hola, buenas noches venía a ver a Beatriz Carrasco.

-Está en planta, en la habitación 304.

-Muchas gracias. Venga niñas, vamos.

Llamamos a la puerta y entramos.

Marta se quedó parada, pero enseguida reacciono, se acercó a su madre y la abrazó.

-Mama, está bien?

-Si tranquila, solo tengo una pequeña contractura en el cuello, y una quemadura de segundo grado en la pierna.

-Quien es el otro?-dije yo.

-Ya está en casa, era una amiga.

-Cuando te dan el alta?-preguntó mi madre.

-Mañana al mediodía ya me podre ir a casa, necesito quedarme esta noche, por lo de la quemadura.

Después de 5 minutos mi móvil sonó, tenía un mensaje. Era Justin.

Justin: Estas en casa?

Paula: No por?

Justin: avísame cuando llegues te quiero!

Joder que raro estaba. En fin, ahora tenía intriga o sea que metí algo de prisa.

-Mama, que tal si vamos para casa y Marta se viene a dormir?

-Vale. 

-Pero… yo no quiero molestar.

-No molestas hombre, pero venga que si no la cena…

-Bueno, mama mañana nos vemos. Te quiero-la dio un beso y yo repetí el mismo gesto.

Después de 20 minutos estábamos en casa, abrí la puerta con muchas prisas.

-A que vienen esas ganas de querer venir a casa?

-No sé, Justin me ha dicho-me corto

-No me digas más….

-Vamos Marta

Subimos las escaleras a toda ostia y entré en mi habitación.

-Se puede saber que esperabas encontrar?

-No se…

-Voy a darme una ducha si me lo permites vale?

-Adelante ya sabes dónde está el baño.

-Borde que eres cuando quieres.-la hice una mueca que nos hizo reír a las dos.

Al fin Marta salió de la ducha.

-Pero mujer, coge el albornoz.

-Con la toalla ya me apaño gracias.

-Bueno ahora voy yo.

Entré en la ducha y después de 5 minutos escuche un… JODER!

Me alarmé.

Me aclaré y me puse el albornoz.

-Marta estas bien?

-Si por?

-No se tu sabrás has gritado no?

-Mmmm… si… Mira tú móvil anda.

-Qué?

-Habrá conversación con Justin i lee.

-Voy calma niña calma.

-Que pone?

-Que le avise cuando llegue a casa. Que tiene de emocionante eso.

-Pues dile que estas en casa.

La hice caso. Al momento me respondió.

Justin: Túmbate en la cama.

Paula: Madre mía haber que me vas hacer.

Justin: Lo he pensado pero… tú confía en mí.

Paula: ahahha salido! Vale.

Justin: En cuánto te tumbes mira al techo.

Paula: OK ;) 

Me tumbé y…

Capítulo 13

Narra Justin.

-Haber princesa, pon la marcha y luego pisa el embrague suavemente si?
-No hace falta unas clases-dijo sarcástica.
Elevé una ceja que la hizo carcajear.
Al instante, aceleró y salió en dirección a casa a toda ostia.
-Paula, despacio- empecé a reír.
-¿Qué Drew tienes miedo?
No dije nada tan solo enrollé mis brazos en la cintura de ella, y carcajeó.
Llegamos a su casa y paró el motor, bajó de la moto y me entrego el casco.
-Me lo e pasado muy bien Justin…-sonrió tímidamente y se acercó para darme un pequeño beso en los labios.
Se fue alejar pero la estire del brazo y la deje a tan solo dos centímetros de mí. Me miró a los ojos y luego desvió la mirada hacia mis labios, entonces fue cuando la besé.
-Te estas acostumbrando a robarme besos Señor Justin.
- No puedo evitarlo-se alejó y me empujó levemente.
-Anda, hasta mañana-dijo alejándose. La repase con la mirada de arriba abajo.
Agité la cabeza y me dirigí a casa. Entré en el parquin y dejé la moto.
-Hola manito-dijo Jazzy alarmándome.
-Pequeña que haces aquí?
-Es que… quiero ir a la playa a bañarme me llevas?
-Pero Jazzy-me cortó.
-Pofabooo-dijo poniendo morritos.
-Esta bien… Vete a poner el bañador.
-Ya esta-dijo elevando su camiseta para mostrarme el bañador.
Me tentó la risa y la cogí en brazos, para darle un besito en la mejilla.
-Anda vamos.
Después de 5 minutos caminando llegamos a la playa y Jazzy salió corriendo.
-Pequeña ten cuidado!-grité. Me senté en la arena y mi móvil empezó a vibrar.
2 nuevos whatsapp.
Paula: Hola!
Mañana te apetece ir a un sitio?
Justin: Ya no puedes vivir sin mi e!
A dónde?
Paula: Bueno, se te echa de menos…
A y es sorpresa, tendrás que confiar en mi…
Justin:  Admítelo vamos no puedes vivir sin mi princesa!
Vale!
Paula: Mmmm… vale lo admito, si tu admites que el primero que no puede vivir sin mi eres tu! :P
Justin: Admito que no puedo vivir sin… tus besos, tus caricias, tus abrazos, tus te quiero …Que no puedo vivir sin ti.
Paula: oooooo!
Justin joder me vas hacer llorar. Yo también te quiero mucho!
Justin: J
Paula: Bueno tengo que ir a hacer la cena, mi madre vendrá dentro de un rato que ha ido a comprar.
Justin: vale
Paula: Mañana ven a recogerme a las 10 vale?
Justin: ahí estaré buenas noches!
Paula: Buenas noches

*FIN DE LA CONVERSACIÓN*

Me metí el móvil en el bolsillo y avise a mi hermana para que fuera saliendo del agua, ella obedeció y se acercó a mí para que le diera la toalla.
La ayude a vestirse y fuimos para casa.
-Hola mama!-avise de que ya estaba en casa.
-Justin, estoy bañando a tu hermano ahora bajo.
-Vale-me senté en el sofá, con Jazmín en las faldas.
Encendí la tele… vaya mierda simplemente había 4 canales. Lo puse en uno de dibujos animados y deje a Jazzy en un lado del sofá.
Subí las escaleras y me metí en mi habitación.
Puse la ropa dentro un cesto de mimbre y entré en mi baño a darme una corta ducha.
Al salir cogí unos bóxers del armario y un pantalón de pijama.
Bajé a la cocina y estaba mama preparando la cena.
-Hola mi niño-dijo dedicándome una de sus mejores sonrisas.
-Me encanta cuando sonríes así mama. –la abracé por la espalda.
-Y a mí me gusta verte tan feliz-consiguió sacarme una sonrisa que me hacía parecer un tanto gilipoyas.
Cogí la ensalada que había encima del mármol y me senté en la mesa con mama.
-Bueno cuéntame… Que tal con Paula?
-Es perfecta.
-Se la ve una chica muy madura.
-No sabes cuánto y más de lo que la han hecho pasar-mi cara cambió a  un rostro mucho más serio.
-¿Por qué? Ha pasado algo?
-Un cabrón la engaño y estuvo ingresada en el hospital…-apreté mis puños, pero mi madre me dio una suave caricia, cosa que me hico mirarla a los ojos.
-Justin, no pienses en ello… ahora eres tú el que la tienes que hacer feliz, el que la tienes que hacer olvidar… Su madre ha hablado conmigo esta mañana y tenía algo de miedo a que la volvieran hacer daño.
-Yo no puedo hacerla feliz mama-dije con un nudo en la garganta.
-¿¡Porque- dijo muy sorprendida.?!-Pero si estáis bien
-Si mama pero dentro de un mes y medio volvemos a Canadá y estaremos a miles de kilómetros, y la puta distancia nos va acabar separando. Esto es una mierda mama, yo la quiero, ella me quiere y por la puta distancia tendremos que olvidar cosas que ninguno de los dos queremos.- me cayó una lagrima.
-Ya le has comentado de venirse a Canadá verdad?
-Si, como lo sabes?
-No estarías tan seguro de que lo vuestro no funcionará.
-Mama no quiero perderla- agaché la cabeza para intentar esconder alguna que otra lagrima amarga. De esas que te queman, de esas que duelen…
Mi madre se acercó a mí y me dio un beso en la frente.
-Justin, tranquilo… las cosas no son siempre como uno las desearía, pero tu lo puedes convertir en lo mejor de tu vida. Recuerda Justin Siempre hacia arriba.
Salió de la cocina y subió las escaleras.
Me levanté de la silla y apagué la luz de la cocina. Subí a mi habitación y si ni siquiera encender la luz me metí en mi cama. Mañana había quedado con Paula y quería disfrutar al máximo lo poco que me quedaba con ella.

El despertador empezó a sonar. Eran las 10, dentro de media hora había quedado en su casa.
Así que me vestí, me puse unos pantalones negros con una camiseta a juego y la chupa.
Bajé sigilosamente a la cocina, a esas horas mis hermanos todavía dormían al igual que mi madre. Cogí un vaso de zumo de manzana y escribí una nota que decía algo así como:

-Mama estoy con Paula,  cualquier cosa llámame, seguramente no venga a comer.
 Tu hijo que te quiere Justin.
Cogí las llaves del coche y mi móvil. Entré en el garaje y subí a mi coche.
Al estar enfrenté de su casa, la envié un mensaje.

Justin: Princesa ya estoy abajo esperándote.
Paula: Un momento.
Justin: Cariño la puntualidad no es lo tuyo. Siempre me haces esperar.
Paula: Lo se casi siempre llego tarde a todo.
Justin: Dicen que lo bueno se hace esperar.
Paula: ya…
Justin: y ese ‘’ya…’’?
Paula: ahahah nada nada .
Justin: No tardes…

-No tardo-dijo al fin saliendo por la puerta.
-Joder…-susurré.
Bajé del coche para abrirla la puerta del copiloto.
-Estas preciosa-la susurré en el oído, ella volteo en seco y me dio un suave beso en la comisura de los labios.
-Eso me a gustado mucho.-sonreí y me monté en el coche.-Bueno tu dirás.-me cortó
-El teatro Palace sabes dónde esta?
-Si eso creo.
-Pues allí.
-Y para que quieres que vayamos al teatro?
-Confía en mi.
Arranqué el motor y me puse en dirección a la ciudad.
Al llegar aparqué justo enfrente del teatro, ajamos y me cogió de la mano.
-Venga corre!
-Ei pequeña porque tanta prisa?-la estire del brazo y la deje a unos centímetros de mi.
-Tu confía en mi por favor-asentí con la cabeza y entramos.
De pronto apareció una chica de tez morena.
-Hola puedo ayudarles en algo?
-Sí. De hecho había quedado con Robert el dueño.
-Un momentito voy avisarle a nombre de quién?
-Justin.
-A mi nombre-dije asombrado.
-Si.
Después de 5 minutos apareció un hombre algo mayor.
-Hola buenos días tu eres Paula la nueva modelo verdad?
-Si-dijo tímida.
Había dicho modelo? Paula era modelo?
-Seguidme.
-Paula-la estire del brazo.
-No me habías contado de que eras modelo.
-Era una sorpresa me entré antes de ayer me dijeron que trajera a un amigo o pareja querían hacer una sesión de fotos de  una pareja.
-Haber  ven.-me la arrebataron de las manos.
-Perdona chaval cómo te llamas?
-Yo… em esto… Justin.-tragué saliva
-Acompáñame a tu camerino.
Camerino? Joder.
Después de 10 minutos me llevaron a una sala. Estaba llena de focos cámaras y fotógrafos.
Me estaba poniendo nervioso, ella estaba tardando demasiado, me temía lo peor.
De pronto escuche la voz del hombre que se había llevado a Paula.
Haber cariño ven por aquí, corrió la cortina y apareció ella.
Ostia, era un ángel, un puto ángel caído del cielo.
-Se te cae la baba Drew-me dijo en un susurro.
-Haber Paula súbete  al pequeño escenario y Justin cógela por la cintura.
No sabia como cogerla, estaba tan hermosa.
En mi cabeza aparecía algún que otro pensamiento impuro.
Al cogerla…
ZAS! Primera foto.
-Ahora Justin apóyate, en ese árbol y tu Paula ponte enfrente. Justin cógela de la barbilla.
-Esto me esta empezando a gustar-la susurre.
-Pero si tu tienes que estar acostumbrado a esto-me dijo acercándose.
-Si… pero…-cambie de tema.-Estas fotos saldrán en algún sitio Paula?
-No tranquilo, es nada más para la agencia tu tranquilo. Ves la chica de allí-me dijo señalando.
-Si…
-Pues sabe quién eres y ella me ha explicado todo, además ellos serían los primeros en tener follones.
La mire a los labios y otro flash salió disparado.
-Ahora, me gustaría algo más de realismo. Justin bésala.
La mire y ella empezó a reír tímidamente.
La acerqué y la subí a horcadas. Desvié la mirada hacia los fotógrafos y me miraban con curiosidad. Volví la mirada hacia ella y la guiñe el ojo. Se acerco despacio y enrolló sus brazos en el cuello para seguidamente perderse en mi cuello.
Foto tras foto. La sesión llegó a su fin.
-Bueno chicos hemos terminado, podéis ir a cambiaros, Paula ya te llamaré para que recojas las fotos.
-Vale gracias, hasta luego.se metió en su camerino.
Agité la cabeza e hice lo mismo.
Al salir vi que no estaba, me dirigí a recepción, allí estaba la chica que nos recibió al principio, y según Paula sabia quién era yo.
-Hola-la dije, pareció alarmarse.
-Tu eres Justin Bieber verdad?
-Shhtt, si-carcajee.-Pero promete no decir nada.
-Vale-asintió con la cabeza.-Que querías, o sea porque has venido?
-Me gustaría que me hicieras un poster con la foto del árbol…
-Espera un momento-se levantó de la silla y entró en una pequeña sala.-Pásate esta tarde por aquí.
-Esta tarde? No puede ser antes?
-Lo siento-se sentó en la silla.
-Vale, gracias hasta luego.
-Hola eres el famoso Justin Bieber-me dijo una voz femenina en el oído.
Me giré despacio.
-Me has asustado joder!
-Lo siento-me dio un beso en los labios.
-Te voy a llevar a un sitio a comer, te encantara.
-Vale… tengo hambre y bastante.

*3 Horas más tarde*

-Gracias por todo-me guiñó un ojo.
-No me las des todavía…

Capitulo 12

Narra Paula

-Hola Juti- dijo Jaxon apareciendo detrás de la puerta.
-Hola pequeño-dije cogiéndolo en brazos.
-Serias una buena mama-dijo Justin abrazándome por la cintura.
-Y tu un buen padre-dije picara mientras dejaba a Jaxon en el suelo.
Me cogió la mano y fuimos a la cocina.
-Hola a todas!-dijo Justin agarrándome por la cintura.
-Hola! ¿Qué tal lo pasasteis ayer?-dijo Pattie.
-Muy muy bien-contesté con una gran sonrisa.
-MMMM no habréis dormido en la misma cama no?-dijo mama aguantándose la risa.
-Pero bueno mama! Por quien me tomas?-dije mientras me acercaba a ella y la susurre un si disimulado.
-Yo? No se preguntó…-carcajeó mientras salía con Pattie por la concina.
-Venid comeremos en la terraza.
La seguimos y me senté al lado de Justin.
-Mirad lo que hemos preparado.
-Joder que buena pinta lasaña!-dijo Justin.
-¿Qué ya te  ha enseñado como lo hace-le dije a Pattie.
-Si tiene mucha traza haciéndola.-
Mama repartió la lasaña entre los 6 y nos pusimos a comer.
-Justin ya que has terminado… porque no le enseñas como ha quedado esto a Paula, y de paso sube a Jazzy a su habitación para que juegue.
-Vale, Paula vente.
Subimos por las escaleras y repasaba cada rincón con la mirada, pues eso había cambiado bastante…
-Mira esta es la habitación de Jaxon.-me cedió el paso.
Era preciosa, la pared era verde oscuro y estaba llena de juguetes.
-Es muy bonita.
-Mira esta es la mía Paula-dijo tirando Jazzy de mi brazo.
-Haber cariño-me corté. Era la habitación perfecta, aquella que toda niña de su edad le encantaría tener. Tenía la pared pintada en rosa clarito. Había un montón de muñecas, vestidos. Era muy bonita.
-Es preciosa Jazzy, me encanta.-la abracé.
-Y esta es la mía…-sacó una sonrisa pícara, de esas que me vuelven terriblemente loca.
Vale en definitiva me queda con la de Justin.
-Espera que dejo a Jazzy en su habitación y vengo.
-Vale aquí te espero-me acerqué a su escritorio tenía varios CD’s. En uno ponía Never say never. De pronto noté unas manos en mi cintura.
-Que cotilleando mis cosas? Me susurró, yo volteé y quedamos a unos centímetros.
-Si, mirando tus cositas de chico famoso.-dije mostrándole el disco.
-Llévatele a casa y le escuchas.-se dirigió a su armario y elevé una ceja.
-Vale mañana te le devuelvo.
-Pero esto no!-me puso una gorra. –Ven mírate al espejo. Te gusta?
-Es muy bonita, pero no estas gorras son muy caras Justin yo no puedo aceptar más regalos así-me cortó.
-Nunca habrá un regalo con más valor que tú.
Le besé y el me apoyo levemente en la pared. Empecé a jugar con su labio inferior. Le mordí. E l pareció alejarse un poco pero enseguida retomó los labios. Me estaba acostumbrando a sus besos.
-Te he dicho que me encantas?-le dije con la voz bastante agitada.
Me siguió besando, la cosa iba a ma. Yo tenía calor, notaba que la ropa empezaba a sobrar.
Justin metió la mano por debajo de mi camiseta y la subió a la altura del broche del sujetador.
-No te atrevas…-le dije aun con los ojos cerrados.
-O si no que?-me pego un mordisco en el cuello el cual me hizo dar un suspiro. Su lengua entró en mi boca. Yo le correspondía. Cuando estaba así con él. Me aislaba del mundo, salía de la puta realidad. Formaba mi pequeño mundo con él.
Le fui a quitar la camiseta. Pero él fue más hábil y me tumbo sobre su cama. Puse morritos y el carcajeó.
-Qué te pasa princesa? No te gusta ser vencida no?
- Mmmm creo que no…-dije colocándome esta vez yo encima de él. El con su mano sobre mi espalda acortó la distancia entre los dos. Su mano se coló nuevamente dentro de mi camiseta. Subía y bajaba haciéndome sentir unos tremendos escalofríos. En mi muslo notaba un pequeño bulto. Me aleje y me dejé caer sobre el otro lado de la cama empecé a carcajear.
El pareció darse cuenta.
-Mmmm ves lo que provocas?
-Es culpa mía encima?!
-Si-se acercó y me robo un beso.
Me puse en pie, el me miró extrañado. Me acerqué a una de sus guitarras y me senté en el suelo. El me miraba con asombro. Empecé a tocar. Una canción que compuse después de salir del hospital. Mientras tocaba mis lágrimas fluían como nada.  Y ese recuerdo vino a mi mente.

*FLASH BACK*
-Cariño que haces-dijo mama entrando en mi habitación.
-Tocando, es lo único que me consuela ahora…
-No te comas la cabeza corazón Paula.-seguía tocando.
Los días pasaron y compuse una pequeña canción, esa que expresaba mi dolor, con la que me desahogaba. Era preciosa. Pero a la vez me hacía recordar.
*FIN DEL FLASH BACK*

Justin se acercó a mí y me abrazó fuerte.
-No llores por cabrones por favor.-yo asentí y me seque las lágrimas.-¿Quieres que vayamos a dar una vuelta en moto?
Le miré, acababa de decir moto.
-Si!!!-le abracé y le cogí de la mano.
-Mama vamos a dar una vuelta en moto.-dijo el cogiendo su chupa.
-Vale dijo Pattie.
-Paula, en moto?-me dijo mama con una tez más seria.
-Si…No puedo ir?
-Sí, pero por favor ir con cuidado. Prométemelo.
-Te lo prometo mama.
-La cuidare bien Abi-dijo Justin serio.
Salimos por la puerta y Justin abrió el pequeño garaje, sacó la moto y me hizo una seña para que me subiera.
-Toma el casco.-me le puse.
Arrancó la moto y acelero, en ese momento me agarré a él.
-No sabía que tenías miedo, tu amiga Marta me dijo que te gustaba todo esto.
-Si Justin pero joder pensaba que ibas a arrancar.
Carcajeó y arrancó. Cada vez iba más rápido… Y yo cada vez estaba más aferrada a él. De pronto paro en seco.
-¿Qué pasa?
-Ven, baja.
-Porque? A dónde vamos?
-Ahí- dijo señalando un lago.
Le cogí de la mano y fuimos hacia el lago. Nos sentamos en un banco.
Estaba un poco serio. No lograba entender porque este cambio ahora…
-Paula, sabes que yo no podré estar aquí siempre verdad de aquí 3 meses me iré a Canadá,, porque tengo que continuar con mi carrera. Yo elegí ese mundo y-le corté.
-Tu crees en las relaciones a distancia Justin? Porque yo no? Si acaso me vas a pedir que continuemos uno a cada punta del mundo yo no podré…Ya lo he pasado bastante mal como para que ahora tenga que aguantar una relación a miles de kilómetros y no Justin no!
-Paula vente conmigo a Canadá.
-Justin yo no puedo dejar a mi madre aquí! Sola… ni a mis amigas… ellas son mi vida. Sin ellas yo no estaría aquí… contigo…
-Que se vengan con nosotros.
-No se Justin aquí tienen todos su vida-dije pasando el dedo por encima de su tatuaje.
-Te gusta?-dijo con brillo en los ojos
-Si mucho!-dije dándole un beso en la mejilla.
-Significa cree. Believe in your dreams Paula.
-Mi sueño es estar contigo pero lo veo muy difícil de aquí a un tiempo.-susurré. Justin! Yo también quiero un tatuaje…
-Estas segura?
-Si, era uno de los regalos que quería para mi cumpleaños. –antes de que pudiera acabar me cogió en volandas.
-Justin por dios bájame!
-Shht, o vendrán los paparazis a por nosotros.
-Que paparazis?
-Mira hacia detrás disimuladamente.
Me giré y había dos hombre con unas grandes cámaras.
-Toma el casco y sube corre.
Le hice el caso. Arrancó la moto y salimos de aquel lugar.
Después de 10 minutos llegamos a un pequeño local, en el letrero ponía algo asi como.
Tattoo world.
-Venga entremos.
Aquel lugar era algo siniestro. No había mucha luz y olía a tabaco. De la nada apareció un hombre tatuado de los pies a la cabeza.
-Buenas tardes que desean?
-Hola buenas tardes, veníamos porque ella quiere hacerse un tatuaje.
-Muy bien. Ha visto alguno que te guste?
-No de hecho… había pensado en uno propio-sonreí y Justin me miró sorprendido.
-Pues entré y túmbese en esa camilla. –obedecí y entré en una pequeña sala. Había un montón de utensilios y botes.
-Que alucinante verdad?-dijo Justin algo sarcástico.
-Si bueno esto para ti no es nuevo la verdad…
-Pero la primera vez te dan ganas de volver hacia atrás.
-Gracias. Me animas mucho sabes…
-Bueno y donde deseas el tatuaje?-interrumpió el hombre.
-Enla cadera.
-Mmmm vienes bien segura para ser la primera vez-dijo poniendo una crema y seguidamente algo de hielo para dormir la zona.
-Y que quieres que ponga.-le hice una seña para que se acercase y el paro el oído.
-Vale y yo no lo puedo saber-dijo esta vez Justin.
-Es sorpresa!
-Pues empecemos-dijo encendiendo la máquina de tatuar.
Después de casi 10 minutos infinitos, el hombre apago la máquina. Pequeña ya puedes abrir los ojos, he terminado.
-Me encanta-dije colocando la camisa en su sitio.
Me puse en pie y me dirigí a caja, para pagar. Después de eso salimos de la tienda.
-Bueno que chica misteriosa-dijo acercándome a el por la cintura.-Me vas a enseñar el tatuaje?
No dije nada simplemente  elevé la camisa.
Eran unas alas en las cuales la sombra eran las iniciales de su nombre
Me agarro y me subió a horcadas en sus brazos. Me besó y me bajó nuevamente para darme una palmada en el trasero.
-¿Qué te gusta?
-Me encanta.
Me subí en la moto, esta vez delante.
-Sube-le dije.
-Paula no tienes carnet y dudo que hayas llevado una de estas…
-Tu me enseñas no? Sube-dije mordiéndome el labio inferior.
El carcajeó y subió en la moto. Encendí el motor y….

Capítulo 11

Narra Paula.

La luz de la mañana invadía mi habitación. Me removí en la cama y vi que Justin estaba a mi lado. Una sonrisa pícara apareció en mi rostro. Me moví un poco acercándome a él. Me dolía la cabeza. Anoche había bebido demasiado.
Le di un beso en los labios. Pero nada…seguía dormido.
-Justin te quiero-susurré.
-Y yo-me contestó yo carcajeé, al momento retumbo en mi cabeza.
-Para lo que quieres contestas.
-Estas bien- dijo todavía con los ojos cerrados.
-Por qué lo dices?
-Por lo de anoche…-abrió los ojos lentamente.
-Que paso?! Justin que hicimos?
-Ves por eso no me deje llevar, sabia que no te acordarías.
-Bueno me acuerdo de que te quite la camiseta y-me cortó con una carcajada.
-No paso nada-dijo estirándome para  ponerme encima de el.
-Seguro?
-Que pasa no te fías de mi?
Le di un beso en la comisura de los labios y bajé de la cama.
-Dios me duele la cabeza.
-Bebiste demasiado…-levantó una ceja.
-Voy a ducharme.
Entré en el cuarto de baño encendí el grifo y deje que el agua se templara mientras preparaba las toallas. Entré dentro de la ducha y una pequeña risa ilumino mi cara. No me podía creer todavía que estuviera con Justin… Después de 15 minutos me enrollé una toalla en el cuerpo y otra en el pelo. Y salí del baño. Fui hacia el armario.
-Mmmm te vas a pasear así delante de mis narices-dijo con una preciosa sonrisa en su cara.
-Estoy en mi casa-me cortó.
-Conmigo.
El móvil empezó a sonar.
-Justin cógeme algo de ropa por favor.
-Yo?
-Si coño-corrí hacia el baño y cerré la puerta.
-Si?
-Hola cariño te he despertado?
-No mami! Que… que tal?
-Muy bien, te llamo porque Pattie nos invita a comer en su casa. Venid sobre las 2 que iremos a comprar algo a la ciudad para preparar la comida si?
-Vale mama, ahora se lo digo a Justin-oí como carcajeaba, a saber lo que pasaba por su cabeza
-Adiós hija.
-Hasta luego-colgué
Abrí la puerta y me encontré con la cara de Justin.
-Tenemos que ir a la ciudad a comprar.
-El que?
-El postre.
-Que postre?
-Vamos a comer a tu casa y nosotras llevamos el postre.
-Vale a qué hora tenemos que estar en mi casa?
-Sobre las 2.
-Muy bien. Toma.
-Haber. Un short negro y una camiseta calada blanca. Tienes buen gusto Drew.
-A si me llama mi madre cuando se enfada.
-Pero a mí me gusta-puse morritos.-Ahora salgo anda.-entré y me vestí, fui a salir pero… me acordé de mi neceser de maquillaje. Le abrí y saque el lápiz de ojo el rímel y un eye liner. Me pinte un poco y salí.
-Que te parece?
-Me encanta.-me dio un beso. -Voy a ducharme yo vale?
Asentí  y me senté en la cama. Me puse mis vans negras y me tumbé en la cama.
Cuando estaba apunto de quedarme dormida. Llamaron a la puerta de la habitación.
Abrí y…
-TIA! Explica todo!-dijeron Cris y Marta
-Shttt esta duchándose coño callar. Y no ha pasado nada raro. Enserio hemos dormido juntos pero…-empecé a reír.
-Pero que coño que?
-Nada que no hubo nada mas que besos.
-ooooo que bonito.
-Si, si muy bonito, venga id bajando a desayunar que ahora bajo.
-Vale-dijeron corriendo por el pasillo.
Entré a la habitación y Justin ya estaba casi listo.
-Princesa no te ha enseñado a llamar a la puerta?
-Te recuerdo que estas en mi habitación-dije cogiendo el bolsito, las gafas y el móvil.
-Lo se-me cogió por la cintura y me dio un beso en el cuello.
-Anda vamos a desayunar.
-No.
-Justin yo tengo hambre.
-Yo te llevo a desayunar…
-Vale vamos va.
Bajamos a la cocina y allí estaban mis dos amigas aspensas de que bajaramos.
-Buenos días par de dos.-dijo Marta. ¿Qué ha reponer fuerzas…?
-O dios que pesada. En fin nos vamos desayunamos fuera.
-A donde vais?
-A la ciudad a comprar el postre voy a comer a su casa. Me lo ha dicho mi madre nos ha invitado Pattie.
-Ooo comida familiar y todo-empezó a reír Marta.
-Tú tienes llaves o sea que cerrar cuando salgáis. Hasta luego locas.
Salimos de casa y nos metimos en el coche. Encendió el motor y cogimos la carretera hacia la ciudad. Aumento la velocidad y puse mi manos sobre la suya que se encontraba en el cambio de marchas. Él sonrió, pero no quitó la mirada de la carretera. Llegamos a un centro comercial. Aparcó y me abrió la puerta.
-Que caballeroso-le cogí la mano y subimos por las escaleras mecánicas.
Llegamos a la primera planta. Vi unos pantalones para Justin preciosos eran blancos.
-Ven quiero mirar una cosa-dije acercándome a la tienda.-Te gustan estos pantalones?
-Si mucho.-carcajeó.
-Pruébatelos, por favor.
-Vale-dijo cogiéndolos- Vienes?
-Si! Entra en este probador. Te espe-me cortó metiéndome con él  dentro del vestuario. Yo carcajeé. Se quitó las bambas y los pantalones. Me miró y se mojó los labios.
-Me gusta cómo te quedan.
-Si?!-dijo acercándose rápidamente.
-Tú lo que querías era tema en los vestuarios… Te vas a quedar con las ganas…
-No creo caerás rendida a mis pies en nada.
-Estas seguro?-me acarició el muslo y yo cerré los ojos.
-Si-me susurró en el oído, un tremendo escalofrió recorrió mi columna.
Le di un beso y salí del vestuario.
-Te espero fuera…-carcajeé.
Fui hacia caja y pagué los pantalones.
Justin salió y me vió con una bolsa.
-Que ya te has comprado sin decirme nada.
-No yo no-le entregué la bolsa que contenían los pantalones.
-Joder Paula porque?
-Porque que?
-Para que me los compras?
-Es un regalo. Y no quiero que rechistes, tengo hambre vamos a desayunar.
Llegamos a un pequeño puesto donde vendían dulces.
-Me apetecen croissants de chocolate.
-Póngame 10 croissants de chocolate.
Salimos a una pequeña terraza que había y nos sentamos en un banco.
Empezamos a comer pero de pronto un par de jovencitas se nos quedaron mirando una de ellas empezó a reír pero a la vez a llorar.
Justin pareció inquietarse me estiró del brazo.
-Vámonos a comprar el postre.
-Justin que la pasa a esa chica. Porque llora al vernos?
-Paula vamos!
No dije nada solo asentí y aligeré un poco el paso. Entramos en el supermercado.
-Mira te gusta este helado. Tiene buena pinta.
-Si cógele.
Me giré y vi como las chicas de antes estaban nuevamente detrás de nosotros. Joder quienes eran.  Lloraban y decían mira es el es el.
-Justin explícame que esta pasando.
-Nada.
-Y una mierda. Deje el helado en su sitio y dejé a Justin allí.
-Paula.-no me giré. Paula espera-me giro el bruscamente.
-Que!?
-Para!
-Me vas a explicar qué coño está pasando aquí o qué?!
-Ahora no sube al coche.
-Por qué?
-Sube al coche por favor!-subí al coche pegando un portazo. Justin subió y puso el motor en marcha. Arranco a toda prisa. Una vez en la carretera aceleró más.
-Para!-no me contestaba. Apretaba su mandíbula.-Justin que pares! O me bajo!
Paro en seco. SE quitó las gafas. Sus ojos no eran dorados, habían cobrado un color más oscuro.
-Que ha pasado en el centro comercial? Porque lloraban las chicas? De qué coño te conocen?
Eres famoso o algo por el estilo? Actor? Cantante?! Dime Justin! Joder!

-Soy cantante.- me quedé en blanco no sabía que contestar, estaba con un famoso. El famoso Justin Bieber. EL que tenía a millones de chicas a su alrededor?!- No te lo quería decir, tenía miedo a que me rechazaras por eso, a que tuvieras miedo a meterte en mi mundo, tenía miedo a que dejaras de tratarme como me tratas.
-Justin 1 no te hubiera rechazado 2 No tiene por qué influenciarme y 3 Yo seas lo que seas te iba a tratar igual sabes…- Entonces, si eres famoso. Eso significa que tarde o temprano te vas a ir no? –Que esto será un puto amor de verano?-empecé a llorar. Esta vida era una mierda!
-Justin llévame a casa!
-Vienes a comer a  la m-le corté  estaba histérica quería escaparme, estar sola.
-Que me lleves a mi casa joder!
Arrancó de repente a toda ostia! No bajaba la velocidad, al contrario la aumentaba. Llegamos a mi casa bajé del coche y arranqué a correr. Pero el me cogió por las muñecas.
-Suéltame coño.
Trago saliva y me miro a los ojos, estaban oscuros. Me apretaba fuerte. Me hacía algo de daño y tenía algo de miedo.
-Justin por favor suéltame-me besó. Déjame- repetí
-Que has sentido?
-Nada, no he sentido nada- le engañé joder sus labios eran mi puta adicción, había sentido de todo. Lo peor de todo es que los daba por perdidos.
-No has sentido nada?
-No-me calló con otro beso, este más largo.
-Todavía no dime?
-No- agache la cabeza .No decía nada, elevé la mirada y vi como las lágrimas caían por sus mejillas. Lo siento pude ser una gilipoyas pero le besé no podía ver a la persona a la que quería así. El me cogió en brazos yo enrollé mis piernas en su cintura.
-Paula te quiero! Mucho!-me beso y su lengua empezó una batalla con la mía.
-Y yo Justin!
-Prométeme que no me vas a cambiar tu forma después de saber que soy-le callé con un beso.
-Te lo prometo.
Después de casi 10 minutos manteniendo una batalla entre nuestras lenguas. El teléfono de Justin sonó, era su madre.
-Que te ha dicho?
-Que si nos faltaba mucho para llegar, la he dicho que ya estamos aquí.
-Ya verás cuando vea que no hemos comprado postre, nos van a matar.
-O si…
-Tienes helado en tu casa?
-Si!
-Pues ya está amor.
-Vale voy.
Después de dos minutos aparecí con los helados.
-Vamos va.
Llamamos al timbre y….